HEBRAS SUELTAS
Debe de haber una forma razonable de sentirse bien,
así ha sido siempre con las pequeñas cosas de uno
que aquí están, muy fieles, muy presentes,
arropando inmutables los días.
Además mañana pagaré nuestros recibos:
lo que cuesta vivir. Sin embargo, soy consciente
de que quien no pueda pagar
será futuro pasto de desgracias que, al menos,
por ahora, no pueden ser las mías.
Acotando lo nuestro, puedo incluso abrir los ojos tranquila
y pensar que todo va a ir bien, que este toque de queda
para acudir al refugio, sólo me lleva hasta casa,
donde la lluvia limpia el tiempo que nos ha tocado vivir,
ese que siempre se queda en el umbral.
Las noticias que sesgan la vida de los otros cada día
no consiguen derribar la puerta, aunque yo intento
abrir bien los ojos y sumirme en sus tragedias.
Todas las gasas, que vendan mi corazón, me abrigan.
Debe de haber una forma de sentirse bien.
Con cicatrices.
La fragilidad rasgada
y sus hebras sueltas.
Poema inédito para un cuadro de Casilda García Archilla. Mayo 2013